El Granada CF sucumbió en el Ciutad de València. Lo hizo 3-1 en un partido marcado por los errores defensivos. En sala de prensa, Fran Escribá se mostró enfadado con los fallos de los suyos. «Vi el partido muy controlado en la primera parte, pero vino el gol en un error nuestro. A partir del empate la sensación es que estábamos más cerca de ganar que de perder. No obstante, cometimos un error gravísimo y nos costó el 2-1. La sensación que tengo es que hemos perdido más por demérito nuestro que por acierto del Levante».
Cuestionado por la tarjeta amarilla que Mallo Fernández le mostró al cierre del partido, el técnico rojiblanco reconoció no entender la actitud del colegiado. «Quería hablar con el árbitro, pero no estaba por la labor. Me ha sacado amarilla. Muy majo el chico…», a lo que añadió: «Ha pitado la falta cuando ya había entrado el balón. No ha querido hablar conmigo. Es un árbitro joven que tiene mucho que mejorar», finalizaba el preparador valenciano.