Costó sangre, sudor y lágrimas, pero el Granada CF jugará los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Y lo hará gracias a un Luca Zidane que detuvo un penalti en el tiempo reglamentario, sostuvo a su equipo durante el partido y acertó a transformar y detener otra pena máxima durante la tanda. Ese es el resumen de un partido que Fran Escribá valoraba de la siguiente forma. «En la primera parte se nos puso complicado el partido, más si cabe con el penalti en contra. Luego reaccionamos y acabamos bien. Aun así, concedimos una acción que no deberíamos haber concedido. Con el paso del partido la gente no quería equivocarse. En la prórroga sujetamos bien al Real Zaragoza y tuvimos alguna ocasión. Los penaltis son una lotería y los ganamos nosotros».
Cuestionado por sus preferencias de cara a la siguiente ronda, el técnico valenciano fue muy tajante. «No quería viajar y no quería jugar prórroga. Mejor no pido nada y ya veremos que nos toca».
Finalmente, Escribá se deshizo en elogios hacia un Real Zaragoza al que dirigió la temporada pasada. «La igualdad de la categoría hace que puedas ganar o perder ante cualquier rival. Sin embargo, hay veces que se hace una lectura negativa de más cuando simplemente hay que analizar lo que es la competición. Espero y deseo que los dos equipos estemos arriba», finalizaba el preparador valenciano.